Tener tiempo siempre para perder el tiempo

Qué se aprende en los cafés que no se aprende en los lugares formales?
En mi caso una elección de vida que es saber valorar el tiempo y la posibilidad de perder el tiempo. Tener tiempo siempre para perder el tiempo.

“Los pobres, los verdaderos pobres, son todos aquellos que no tienen tiempo para perder tiempo. Los verdaderos pobres, son aquellos que no tienen silencio y no pueden comprarlo. Son aquellos que tienen piernas pero se han olvidado de caminar, como las alas de las gallinas se han olvidado de volar. Son aquellos que comen basura y la pagan como si fuera comida. Son aquellos que tienen el derecho de respirar mierda como si fuera aire. Son aquellos que tienen sólo la libertad de elegir entre un canal de televisión y otro. Son aquellos que viven dramas pasionales con las máquinas. Son aquellos que estando entre muchos, están siempre solos. Los pobres, los verdaderos pobres, son aquellos que no saben que son pobres.”
Eduardo Galeano


Siempre que el tema del tiempo pasa por mi mente escucho la particular voz de Calamaro cantando: “Invento sabandija que sólo confunde…”

Y cuánto nos confunde!

Hoy que es 21 de septiembre, y que de nuevo (luego de siete años) implica para mí el inicio de la primavera, la alegría de la juventud, ese divino tesoro… me siento en un bar a tomar un café que dure mucho más de lo que debería.

Que me robe tiempo para diseñar un isologo, una web, lavar la ropita de mi pequeño, preparar milanesitas de soja que nos salvan cuando llegamos tarde, limpiar el baño, los vidrios, la cocina; que me robe tiempo para ordenar archivos, hacer back ups, seleccionar fotos, buscar información, bajar tipografías…

Me encantan los cafés cuando te roban tiempo, es la única cuenta llena de ceros que pago con alegría.

Ayer hablaba con mi hermana, y recordaba el tiempo en que le dedicaba más tiempo a cosas en las que el fin último no era yo, que a las que eran para mí…

Era más joven?

Entonces, el tiempo no era un problema
sino un regalo para compartir.

Cuando tenemos veinte escuchamos más aunque no parezca, miramos más, vemos muchas más cosas, olemos…

Y la verdad, no sé realmente porqué dejamos de hacerlo.

Hay un montón de respuestas muy coherentes seguro.

Pero en el fondo,
justifican dejar de sentarte con tu amiga de toda la vida para escucharle la misma historia de hace veinte años que te la sabés de memoria, pero que la escuchás con atención porque el qui de la cuestión es que estás con ella, ahí a ladito, disfrutándola?

Hay algo que realmente justifique no desayunar con música mirando por la ventana un buen café con tostadas?

hablar con tu mamá?

llevarle a tu papá en el coche?

visitar a tu abuelo?

merendar con tu hermana?

conocer al hijo de una amiga?

Hay algo que justifique no hacer el amor con el ser amado?

jugar con tus hijos?

tomar una foto?

hacer algo por alguien que te necesita?

"Todo son preguntas…" dirían Juan José e Ignacio.

Me encantan los bares -algún día tendré el mío-
y me pararé detrás de la barra para ver cómo la gente que puede disfrutar de su tiempo,
lo pierde frente a una taza de café con un libro en la mano;
viendo a su hija tomar la copa de helado de sus sueños,
o con cervezas bien heladas entre amigos…

Feliz primavera para todos!

(agregado ahora, creado en septiembre 2009)

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